Basándose en una amplia variedad de fuentes, Mark Cioc hace un brillante examen de la protección de la naturaleza y su historia. Demuestra la función de varios tratados diseñados para proteger las especies migratorias de mayor importancia comercial en el mundo. En gran parte examina la información del siglo pasado. Estos tratados a menudo tienen su origen en los intentos de regular el ritmo de las muerte de los animales más que en la creencia de la necesidad de proteger el hábitat. Los grandes avances en la armas de fuego y la facilidad en eliminar algunas especies obligaron a la ejecución de estos tratados para evitar el exterminio de algunas especies, se intentaba así mantener la población en niveles viables. Es resultado de ello que hoy África esté salpicada de grandes parques nacionales, América del Norte tenga una extensa red de refugios de aves, y que todavía haya ballenas en los océanos. Todos estos tratados siguen hoy en vigor y siguen influyendo en la naturaleza