Los ríos han sido gestionados para administrar los riesgos de inundaciones, mejorar la navegación, o promover usos recreativos. También han sido contaminados por nuestros residuos de todo tipo. Sin embargo, cuestionan fuertemente nuestra imaginación y atraen a muchos ciudadanos, ansiosos por recuperar el contacto con la naturaleza en las orillas de los arroyos que ya no son sistemas naturales, en el sentido estricto, sino sistemas heredados. A través de los siglos algunas costumbres han desaparecido, otras nacen con diversas consecuencias para el funcionamiento de los sistemas del agua. Hoy en día, sin dejar de lado las funciones económicas de los cursos de agua, las empresas están preocupadas por su buen estado ecológico y su futuro, sober todo considerando la influencia del cambio climático. Esto debería plantearnos cuáles son las metas de las operaciones de restauración ecológica. ¿Cuál será su relevancia en unas pocas décadas? ¿Qué tratamos de restaurar? Qué tipo de naturaleza queremos? La historia nos muestra que nuestras relaciones con los ríos han cambiado, y este libro explora muchos aspectos. El autor, que ha participado en los programas de investigación multidisciplinaria sobre la dinámica de los sistemas fluviales, que se inició en Francia en la década de 1980, sabe que no hay un "equilibrio" o vuelta atrás. La gestión de los ríos debe ser parte de un enfoque prospectivo y adaptable para tratar de adecuar el funcionamiento y las expectativas de la sociedad.