Los humanos no son como la mayoría de los mamíferos en la manera de actuar. Se parecen a ellos, pero no actúan como ellos. De hecho, muchos de los rasgos humanos definitorios: longevidad, inteligencia, monogamia y crianza, aprendizaje y lenguaje, son mucho más similares a las aves que a los mamíferos.
Estas similitudes no se originan en los ancestros compartidos sino en historias paralelas. Las historias evolutivas han empujado a humanos y pájaros a encontrar las mismas soluciones. En este libro, AntoneMartinho-Truswell explora estas similitudes para argumentar que se puede aprender mucho sobre los humanos si se piensa en la especie humana como "el pájaro sin plumas". Este es también un libro sobre evolución convergente: evolución que lleva a especies muy diferentes a resultados y comportamientos muy similares.