La serpiente aparece a lo largo del tiempo y las culturas como una figura de la maldad y la miseria. La importancia en todo el mundo de las serpientes en la religión, el mito y el folclore pone de relieve nuestra profunda conexión con la serpiente - pero ¿por qué, cuando tan pocos de nosotros tenemos experiencia de primera mano? La sorprendente respuesta, este libro lo indica, radica en el impacto singular de las serpientes en la evolución de los primates. Basándose en una extensa investigación, Isbell especula acerca de cómo las serpientes podrían haber influido en el desarrollo de un comportamiento específicamente humano: la capacidad para apuntar con el propósito de dirigir la atención.