Los árboles encierran un lugar especial en la espiritualidad de las culturas humanas, como símbolos de la fortaleza de la naturaleza y de la longevidad. Este simbolismo ha acabado por cristalizar en el acto de plantar un árbol como una manifestación cultural de especial significación, que ejemplificaría la evolución desde la semilla hasta el árbol maduro, que tendría un paralelismo en el desarrollo de una vida humana. Este libro no solo explica cómo plantar y cuidar un árbol, sino que además explora el simbolismo de los árboles entre una multitud de temas en relación a las especies más emblemáticas de árboles del mundo. Mediante un examen de las tradiciones globales y de los rituales antiguos, nos enseña como una variedad de especies determinadas pueden ser usadas para los actos de celebraciones conmemorativas en las que se realizan plantaciones de árboles.