La desigualdad es una preocupación global urgente con expertos, políticos, académicos y libros de gran éxito que se ocupan de sus causas y consecuencias. En este libro, Carles Lalueza-Fox ofrece una perspectiva completamente nueva sobre el tema, examinando las marcas genéticas que la desigualdad ha dejado en los humanos a lo largo de la historia. Describe estudios genéticos, posibles gracias a nuevas tecnologías de secuenciación de ADN, que revelan capas de desigualdad en sociedades pasadas, manifestadas en patrones de migración, estructuras sociales y prácticas funerarias. A través de su ADN, los esqueletos antiguos tienen mucho que contar y brindan historias anónimas de desigualdad, prejuicios y sufrimiento.
Explora los cambios ancestrales asociados con la migración y describe el sesgo de género descubierto en estas migraciones: las asimetrías sexuales brutales, por ejemplo, entre los exploradores europeos masculinos y las mujeres de América Latina que se revelan mediante análisis de ADN. Considera las estructuras sociales y la evidencia de que se heredó una alta posición social: el mundo antiguo no era una meritocracia. Explica factores sociales y genéticos para considerar si la riqueza es una ventaja en la reproducción. Explora los efectos de la antigua desigualdad en el acervo genético humano. Comprender las desigualdades pasadas es clave para comprender las presentes.