THE INVENTION OF THE MODERN DOG

Durante siglos, diferentes tipos de perros fueron criados en todo el mundo para el trabajo, deporte o compañía. Pero no fue hasta la época victoriana que los criadores comenzaron a producir razas discretas, diferenciadas y estandarizadas. En este libro, Michael Worboys, Julie-Marie Strange y Neil Pemberton exploran cuándo, dónde, por qué y cómo los victorianos inventaron la forma moderna criar perros. Aunque antes de este período era común hablar de "raza" en el contexto del ganado, la idea moderna de una raza de perro definida en términos de forma, tamaño, pelaje y color surgió durante el período victoriano en respuesta a una floreciente cultura de exhibiciones caninas competitivas. Los autores explican cómo los criadores, expositores y showman tomaron prestadas ideas de la genética, así como las prácticas de cría de ganado, caballos, aves de corral y otros criadores de fantasía, y las aplicaron a una especie que durante mucho tiempo se pensó únicamente en términos de trabajo y compañerismo. Las nuevas razas de perros encarnaron y reflejaron aspectos clave de la cultura victoriana, y se extendieron rápidamente por todo el mundo, ya que algunos de los mejores perros de Gran Bretaña fueron llevados a excursiones o exportados en un comercio internacional en crecimiento. Conectando el surgimiento y el desarrollo de ciertas razas de perros a los entendimientos científicos de raza y sangre, así como a la postura de Gran Bretaña en un imperio global, este libro demuestra que el estudio de las culturas de cría de perros permite a los historiadores comprender mejor las complejas relaciones sociales de los últimos tiempos de la Gran Bretaña del siglo XIX.