Las hormigas son probablemente el grupo de insectos dominante en la Tierra, lo que representa un diez a quince por ciento de la biomasa animal en los ecosistemas terrestres. Las plantas con flores, por su parte, deben su éxito evolutivo a una serie de interacciones interespecíficas - tales como la polinización, dispersión de semillas y los herbívoros- que han ayudado a dar forma a su gran diversidad. Este libro reúne las investigaciones de la literatura científica sobre la convolución de hormigas y las plantas para facilitar una mejor comprensión del éxito sin precedentes de estos dos grupos, de las interacciones interespecíficas en general, y, en última instancia, las interacciones en las comunidades biológicas. Sintetiza la dinámica de las interacciones entre las plantas y las hormigas, incluyendo las fuentes de variación en sus resultados. El autor interpreta la importancia de estas interacciones dentro de los ecosistemas y los enfoques para el desarrollo del estudio de estas interacciones en un contexto ecológico y evolutivo más amplio.