En esta exhaustiva y detallada monografía, Gisela Kaplan demuestra lo inteligentes y emocionales que pueden ser las aves australianas. Describe comportamientos complejos, como los duelos o comportamientos de aflicción, los engaños, la solución de problemas y el uso de herramientas. Muchas especies australianas cooperan y se defienden unas a otras, y algunos comportamientos llegan a extremos tales como usar mendrugos para pescar, extraer las partes venenosas de una presa antes de ingerirla, o usar herramientas para abrir moluscos.
Kaplan reúne así evidencias de muchas habilidades cognitivas y las posibles explicaciones de su aparición en un medio como el australiano.
Se trata, pues, del primer intento de arrojar luz de forma científica sobre el comportamiento cognitivo de las aves australianas.