En "La hipótesis de Medea", el famoso paleontólogo Peter Ward propone una visión revolucionaria y provocadora de la relación de la vida con la biosfera de la Tierra. Utilizando los últimos descubrimientos de los registros geológicos, sostiene que la vida podría ser su peor enemigo. Esto está en marcado contraste con la hipótesis Gaia de James Lovelock - la idea de que la vida mantiene las condiciones de habitabilidad de la Tierra. En respuesta a Gaia, Ward invoca Medea, la madre que mató a sus propios hijos y demuestra que todas menos una de las extinciones masivas que han golpeado la Tierra fueron causadas por la misma vida. Mira la historia de nuestro planeta de una manera nueva, revelando una tierra que está siendo testigo de una alarmante disminución de la diversidad y la biomasa. Es, en resumen, un desafío urgente para todos nosotros y obliga al hombre a pensar en nuevas medidas para salvarle de él mismo.