
Como siempre esta marca nos ofrece un binocular de tamaño más reducido que la mayoría de los de la competencia, ligero, con una especial brillantez en los colores y una excelente nitidez.
Smaller, Lighter, Brighter, Sharper
Los nuevos AURORA BGA VHD+, de fabricación japonesa, se presentan con un diseño completamente renovado y un nuevo sistema óptico para ofrecer un binocular con unas prestaciones ópticas de alto nivel con gran campo de visión y distancia mínima de enfoque reducida, en un formato muy compacto y ergonómico.
FABRICADO EN JAPÓN
Incluye funda de Cordura y piel, tapas de los oculares tipo Rainguard, correa de neopreno con sistema de liberación rápida, tapas de los objetivos de goma con anilla de sujeción y gamuza de alta calidad para la limpieza de las lentes.
Un fin de semana de este otoño, durante una salida al Parque Natural de la Serra de Prades, tuve la posibilidad de probar a fondo los nuevos prismáticos Opticron Aurora VGA VHD 10x42 de fabricación japonesa y lo cierto es que quedé gratamente sorprendido.
Lo primero que llama la atención cuando recibes la elegante caja negra en la que van empaquetados es su tamaño, que es relativamente pequeño. Dentro encontraremos, además de los prismáticos, una funda, una correa de neopreno, un paño de limpieza de buen tamaño, la tarjeta de garantía, una bolsita de hielo de silicio y un pequeño sobre de agradecimiento con un pequeño obsequio.
Una vez en el campo, los Aurora destacan por su tamaño y peso que son sensiblemente menores, por ejemplo, que los de mis Zeiss Victory SF que llevé para comparación. Al tacto se notan compactos, sólidos y su construcción parece de muy buena calidad. Tienen un recubrimiento de goma que los hace agradables al tacto y una rueda de enfoque que responde bien a la manipulación y que resulta muy precisa. El ajuste de dioptrías se realiza mediante una rueda situada sobre la de enfoque.
Un elemento que no me acabó de convencer de entrada, fueron las copas de los oculares, que en apariencia parecían un poco sueltas, pero cabe decir que después de un par de días de uso intenso, no aprecié ningún tipo de mal función al subirlas y bajarlas para adaptarlas a la visión con y sin gafas.
Los prismáticos van equipados con protectores, tanto para las lentes de los oculares, con plástico sólido, como para las de los objetivos, con goma más blanda. Es de justicia mencionar que, aunque desempeñan su función, las tapas de los oculares no tienen la calidad que se esperaría de unos prismáticos de esta gama y son, incluso más sencillas, que algunos modelos inferiores de esta misma marca. Por otra parte, personalmente, no utilizo nunca los protectores de las lentes de los objetivos (los inferiores), ya que considero que cualquier elemento que pueda ensuciar los prismáticos viene normalmente de arriba (lluvia, sudor, polvo, etc.) y porque, cuando hace viento, ondean y se convierten en elementos bastante molestos. Por suerte, estos protectores se pueden quitar con mucha facilidad y dejar en el estuche.
En cuanto a la calidad óptica, en condiciones óptimas de luz, me pareció excelente. De hecho, me entretuve en comparar ambos prismáticos gracias a un grupo de Golondrinas dáuricas que estaban paradas en unos cables y apenas fui capaz de apreciar ninguna diferencia con mis Zeiss. Los Opticron Aurora tienen un contraste muy bueno y la definición de los colores es totalmente fidedigna a lo que se percibe a simple vista.
Además, la definición de la periferia de la imagen es notable y esto es particularmente destacable en prismáticos que, como los Aurora, tienen un campo de visión bastante amplio (116 m). Al atardecer, con poca luz, sí que noté una ligera disminución de su rendimiento en comparación con los Zeiss Victory SF, pero cabe decir que este hecho fue percibido únicamente en condiciones de penumbra.
Otra característica que me gustó fue su corta distancia de enfoque. Esto me permitió disfrutar de la belleza de las mariposas sobre las flores y de la de otros insectos que tenía junto a los pies.
En resumen, teniendo en cuenta que su precio está alrededor de los 1.000 €, creo que Opticron ha acertado lanzado un producto excelente en una franja donde cada vez hay más opciones atractivas de diferentes marcas, que en muchos casos, como en el caso de los Aurora, poco tienen que envidiar a modelos de las marcas más reconocidas, que tienen un precio de más del doble. Los Aurora ofrecen una calidad óptica muy buena en un formato pequeño y ligero, pero que se siente extremadamente sólido y bien construido. En un tiempo en el que quien más quien menos va cargado, además de los prismáticos, con una cámara e incluso con una grabadora de sonido, este ahorro de peso y tamaño, sin repercutir en absoluto con la calidad, es una ventaja a tener en cuenta.
Xavier Riera es el responsable del Área de Divulgación y Formación del Institut Català d’Ornitologia (ICO), que gestiona la formación de nuevos ornitólogos a través de numerosas salidas y de cursos de capacitación. Además está especialmente dedicado a la grabación y el estudio de las vocalizaciones de las aves y es uno de los administradores de Trektellen, portal en el que, entre otros parámetros, se almacenan los datos de todas las estaciones de grabación de vocalizaciones nocturnas (NOCMIG) europeas. Xavier Riera también es miembro del Comité Organizador del DELTA BIRDING FESTIVAL.