Es estudio de la biología de los tiburones se ha beneficiado durante la década pasada por el desarrollo y rápida expansión de nuevas técnicas que han proporcionado reveladores datos sobre su genética, comportamiento de alimentación, presas, bioenergía, edad y desarrollo, movimientos, migraciones, usos y preferencias de hábitat, y otros detalles.
Se trata de un libro pionero, en donde se examinan tecnologías como los vehículos autónomos, videos subacuáticos, técnicas de genética molecular, acelerometría y otros temas en capítulos detallados sobre la biología de los elasmobranquios, que se pueden incluso extender a otros peces o mamíferos marinos, e incluso a los reptiles.