Esta obra presenta toda una serie de argumentos y análisis sobre el futuro de la conservación. Las zonas protegidas han sido consideradas históricamente la herramienta principal para la conservación del territorio y la fauna. Estos parques y reservas se hallan aparte del desarrollo, en claro contraste donde el hombre desarrolla sus actividades. Pero incluso a pesar que existe una crisis global sobre la biodiversidad que se está acelerando, hay voces que sostienen que las zonas protegidas son entidades obsoletas. La conservación, sostienen, se ah de hacer considerando el uso del territorio por el hombre. Que se olvide al hombre como causante de las extinciones y se enfoque la conservación como la manera de explotar el territorio de manera sostenible.
En esta obra, expertos de cinco continentes rebaten esas posturas, defendiendo hasta qué punto es importante mantener el sistema de zonas protegidas a resguardo de la explotación intensiva por el hombre.