Un hombre humilde, pero con una presencia dominante, J. Fenwick Lansdowne (canadiense, 1937-2008) fue un apasionado naturalista cuyo cuidadoso estudio y afinidad innata con el mundo de las aves forjó un extraordinario trabajo. Es el primer libro en presentar una descripción general de la vida y obra del artista, J. Fenwick Lansdowne, presentando más de 160 ilustraciones, mientras que siete ensayos ofrecen perspectivas analíticas y recuerdos personales.
Las pinturas de Lansdowne son tan meticulosas en sus detalles como lo son en sus representaciones sensibles. Fue observador de aves desde muy joven (comenzó a observar y dibujar pájaros desde que tenía doce años), Lansdowne se convirtió en uno de los artistas de aves más renombrados y estimados de todos los tiempos. Si bien las comparaciones se realizan rápidamente con el trabajo de John James Audubon, las pinturas de Lansdowne reflejan de manera única la naturaleza esencial de las aves que representó. Como lo explica Robert McCracken Peck en su ensayo, fue la "habilidad extraordinaria de Lansdowne para combinar la comprensión física, intelectual y emocional de la vida de las aves lo que le permitió infundir a sus pinturas tanta autoridad y poder.