Celia fue la última hembra de una subespecie de cabra montesa, que antaño pobló todos los Pirineos y que debido a la caza se fue extinguiéndose de casi toda su área de distribución. En Ordesa quedó el útltimo reducto donde fue languideciendo su exigua población hasta que en el año 2000 la última hembra murió aplastada por un árbol. El libro recoje las imágens que Iñaki ha ido captando durante más de 5 años de visitas regulares a este extraordinario Parque Nacional. Los paisajes, la fauna y la flora que los bucardos ya no van a poblar nunca más, se presentan en todo su esplendor. Alternando con ellos, el texto que les acompaña desgrana anécdotas y experiencias del autor, historias reales sobre la fauna y el paisaje e incluso episodios de ficción sobre lo que podría haber sido Ordesa si determinadas circunstancias no hubiesen acaecido.