El objetivo de cualquier apicultor es obtener unas colonias sanas de abejas y un buen rendimiento de la cosecha de miel. Para conseguirlo, el requisito previo más importante es una oferta integral de néctar, mielada (rocío de miel) y polen desde la
primavera temprana hasta el otoño tardío.
En esta obra el apicultor y el aficionado encontrarán una ayuda inestimable para elegir la ubicación más adecuada de las colonias y para explotar de forma óptima el flujo nectario disponible. Todo ello gracias a las 220 fichas de plantas con las correspondientes tablas sobre épocas de floración así como los niveles de néctar y polen.