Aunque la creación de la oveja Dolly en la década de los 90 del pasado siglo hizo a muchos suponer que era el comienzo de una nueva era, la de los animales modificados genéticamente, esta idea no era nueva. En la década de los años 20 un científico amateur, Hans Duncker, decidió crear mediante ingeniería genética un canario de color rojo.
Aunque sus experimentos fallaron, puso los cimientos para que otros tuvieran éxito después reconociendo que el canario debía ser un producto tanto de la naturaleza como de la cría en cautividad. Mediante la original narrativa de Tim Birkhead, se nos revela cómo la obsesión por transformar el verde original del canario en rojo, inició los desarrollos controvertidos pero al mismo tiempo excitantes de la manipulación genética.