Este libro describe la historia de la conservación y la investigación de los anfibios en Gran Bretaña. El autor, a finales de la década de 1960, fue probablemente el primer conservacionista profesional de anfibios de Gran Bretaña. En aquel momento, la situación de los anfibios era extremadamente grave después de tres décadas de disminución de la población.
Hasta la década de 1990, Arnold Cooke participó directamente en la comprensión y el intento de remediar la situación mediante la investigación, la legislación y la conservación activa. Inició monitoreo, vigilancia y estudios a largo plazo que continuaron hasta bien entrado este siglo. Esta investigación desarrolló y utilizó técnicas de monitoreo simples, como contar tritones reproductores por la noche o sapos muertos en las carreteras.
Los conjuntos de datos resultantes también resultaron valiosos para determinar si el cambio climático afectaba el comportamiento reproductivo. Esta descripción general personal muestra en detalle cómo la conservación de anfibios se desarrolló desde una base de conocimiento relativamente baja con pocos individuos involucrados hasta una abundancia de información disponible para los muchos grupos de personas que ahora están activos en el campo. Incluye material publicado, inédito y que ya no es fácilmente accesible, para enfatizar cómo el conocimiento, las actitudes y los recursos contemporáneos afectaron lo que se hizo y lo que sucedió como resultado.
Varias políticas, estrategias, leyes y otras iniciativas han ayudado a detener o frenar los descensos, pero el futuro aún es incierto