Éste es un libro escrito en homenaje a Manuel Gallego Rodríguez, "Manolín", quien guió los primeros pasos en el estudio del lobo del autor del libro, durante el tiempo que paso en la sierra de Culebra.
Como todos los grandes maestros, "Manolín" praticaba la ciencia de enseñar lo que únicamente cabe aprender mediante la observación en el campo.