La provincia de Málaga juega un excepcional papel ecológico, debido entre otros factores a su cercanía a la costa africana y a la manifiesta influencia del clima atlántico. Si a ello sumamos otros parámetros, como su complejidad orográfica y geológica, entenderemos la importancia de su enorme patrimonio natural, que podría asimilarse a la de un continente en miniatura. El territorio malagueño, el más pequeño de Andalucía en extensión, ocupa una superficie de 7.306 km2, distribuida en 5 áreas naturales que son: la Serranía de Ronda, el Valle del Guadalhorce, la Costa del Sol, la campiña de Antequera y la Axarquía. En todas estas comarcas nos aguardan numerosos tesoros naturales, la mayoría de ellos amparados por la RENPA (Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía). La presente guía pretende darte a conocer los enclaves más significativos de los monumentos, reservas, parajes y parques naturales de la provincia malacitana; en este libro se recogen los 25 mejores recorridos, una elección totalmente subjetiva, pero que sin duda dará una visión general de las riquezas naturales malagueñas.