En 1967, la sonda Lunar Orbiter Mission 4 envió a la Tierra una serie magnífica de fotografías de la superficie lunar, a pesar de la degradación que sufrieron las fotos en el proceso de ser enviadas a nuestro planeta. Muchos años después, Charles Byrne, que ha sido responsable de algunos proyectos importantes relacionados con misiones a la Luna por la NASA, ha trabajado para eliminar las imperfecciones de las fotografías originales, construyendo a partir de aquellas una nueva serie de fotografías de gran valor, totalmente restauradas y mejoradas gracias a las técnicas actuales. El libro presenta la serie de forma que permita un uso rápido y fácil para los astrónomos, añadiendo a las fotos la topografía mostrada en cada imagen de acuerdo a los nombres aprobados en la actualidad por el IAU. Ayuda también el hecho que las fotos se relacionan sistemáticamente con las vistas actuales que se pueden obtener desde nuestro planeta.