Primer volumen de una serie de libros que pretenden abordar los casos de identificación más difíciles en la región del oeste del Paleártico. Comienza con una sección introductoria donde explica la génesis y el concepto de la serie, que en este primer tomo aborda los plumajes otoñales de conjuntos de especies que se parecen. La idea es producir una serie de libros en la vanguardia de los descubrimientos de identificación. Parte del material es nuevo y relativamente no probado todavía. Anima a los lectores a mirar más detenidamente los pájaros, con más cuidado y hacer sus propios descubrimientos.
La mayoría de los observadores de aves salen al campo sabiendo más o menos lo que se podrían encontrar en una temporada determinada y no necesitar toda la información sobre todas las especies que pertenecen a todo el año. Así que el contenido lo enfoca el autor a un conjunto de más de 40 taxones que aparecen a lo largo de 18 capítulos. Estros cubren pares de casos de dificultad, como serían los aguiluchos pálidos europeos y norteamericano (hudsonius), la agachadiza común europea y la norteamericana (delicata), los vencejos común (subespecies europea y asiática) y pálido, mosquitero común y siberiano (tristis), algunos divagantes entre los que comenta algunas rapaces norteamericanas o sílvidos asiáticos, el charrán patinegro europeo y el posible Split americano (Cabot Tern), los tres taxones que ahora se aceptan para la curruca carrasqueña, tres de la curruca zarcerilla, o seis de la tarabilla común y siberiana. Con dibujos de Ray Scally, muy informativos y que recuerdan a los de Lars Jonsson, y fotografías, además de sonogramas.