La información es el principio unificador que permite comprender la evolución de la complejidad en la naturaleza. Más de 150 años después del revolucionario "El origen de las especies" de Darwin, todavía se está intentando comprender y explicar la asombrosa complejidad de la vida. Aunque ahora se sabe cómo procede la evolución para crear complejidad a partir de ingredientes simples, cuantificar esta complejidad sigue siendo una tarea difícil. En este libro, Christoph Adami ofrece una nueva perspectiva sobre la evolución darwiniana al verla a través de la lente de la teoría de la información.
Esta novedosa postura teórica arroja luz sobre cuestiones como cómo los virus desarrollan resistencia a los medicamentos, cómo evolucionan las células para comunicarse y cómo evoluciona la inteligencia. Según esta explicación, la información emerge como el principio unificador central detrás de toda la biología, permitiendo pensar en el origen de la vida (en la Tierra y en otros lugares) de manera sistemática. Adami, líder en el campo de la biología computacional, primero ofrece una introducción accesible a la teoría de la información de las biomoléculas y luego muestra cómo aplicar estas herramientas para medir la información almacenada en secuencias genéticas y proteínas.
Después de esbozar la evidencia experimental de la evolución de la información tanto en bacterias como en organismos digitales, describe la evolución de la robustez en los virus; la cooperación entre células, animales y personas; y la evolución del cerebro y la inteligencia. Basándose en un extenso trabajo previo sobre la evolución bacteriana y digital, Adami establece que (ampliando el famoso comentario de Dobzhansky) nada en biología tiene sentido excepto a la luz de la información. Sostiene que comprender que la información es la base de toda vida nos permite ver más allá de los detalles de la forma de vida para vislumbrar cómo podría ser la vida en otros mundos.