Los techos verdes presentan ventajas sustanciales: Disminuyen la superficie pavimentada, producen O2 y absorben CO2, filtran partículas de polvo y suciedad, evitan recalentamiento de techos con lo que disminuyen los remolinos de polvo, reducen las variaciones de temperatura del ciclo dia-noche, disminuyen las variaciones de humedad en el aire, además tienen larga vida útil, funcionan como aislamiento térmico, protegen de los rayos solares y reducen la entrada de sonido del exterior.