Este libro recupera la importante contribución de las mujeres a los museos, no solo en roles evidentes como trabajadoras, sino también como donantes, visitantes, voluntarias y mecenas. Sugiere que las mujeres actuaron persistentemente para hacer más accesibles los museos, importando objetos domésticos, así como haciendo que los museos fueran más acogedores para los niños, e incluso enfatizando la importancia de la limpieza en el museo. Al mismo tiempo, las mujeres buscaron carreras 'masculinas' en ciencia y curaduria (contribuir al discurspo de las exposiciones) , pero encontraron tales aspiraciones difíciles de lograr; su contribución tendía a mantenerse dentro de áreas claras y feminizadas.
El libro será de interés para quienes trabajan sobre género, cultura o museos. Arroja nueva luz sobre la cultura material de las mujeres y las estrategias materiales, la educación y las carreras profesionales, y las prácticas de ocio. Formará un contexto histórico importante para aquellos que trabajan en estudios de museos contemporáneos.