Cuando William H. Hudson publico Aves y Hombres en 1901, ya era un escritor caracterizado por su militancia en defensa de las aves. En esta obra, intrigada por esta fauna, describe con minucioso detalle el vuelo de las perdices, el comportamiento de los búhos, el canto de los ruiseñores, el plumaje de las grajillas, etc... Y es que desde joven estuvo vinculado a la Society for the Protection of Birds, y ya había escrito varios panfletos donde denunciaba el uso de plumas de garcetas y aves del paraíso en la moda femenina, por ejemplo. Asi, se fue convirtiendo en una voz representativa en los círculos conservacionistas y en un verdadero precursor del ecologismo.
Este libro ha sido por primera vez traducido al castellano. Es un libro que se centra en la gran pasión del autor por las aves y que demuestra su perspectiva global sobre los problemas acarreados por la civilización moderna y el capitalismo internacional.