Desde que en 1933 se estableció el primero, los observatorios de aves británicos han jugado un papel fundamental en la control, el estudio y la conservación de los pájaros migratorios de Gran Bretaña e Irlanda. Este libro tuvo una primera edición el 1976, pero muchas cosas han cambiado desde esta fecha. De ser puntos en los cuales se reunían gente dedicada casi exclusivamente a la observación y el anillamiento de las aves migratorias han pasado a ser lugares donde además se desarrolla actividad de carácter científico. Este libro recoge la historia y el trabajo hecho a cada uno de los 18 observatorios situados en puntos estratégicos de las islas británicas con abundantes aportaciones de guardas, ornitólogos y voluntarios que han participado. También ofrece una amplía descripción del lugar y su entorno natural y de cómo y cuando visitarlos.