La bioenergía que tiene su origen en la agricultura puede permitir la reducción de los combustibles fósiles utilizados, pero es necesario estudiar a fondo todo lo que implica como la cantidad de tierra y energía utilizada, el empleo de agroquímicos, de recursos naturales renovables y el balance global de emisiones. Si medidas apropiadas, la producción de materias primas para la energía podría amenazar la biodiversidad, provocando un deterioro de recursos naturales como el suelo y el agua. En este informe se da cuenta fundamentalmente de las amenazas a la biodiversidad provenientes del crecimiento energético que puedan estar asociadas con el cambio del uso de la tierra.