LOST AMONG THE BIRDS: ACCIDENTALLY FINDING MYSELF IN ONE VERY BIG YEAR

A principios de 2013 Neil Hayward estaba en una encrucijada. No quería abrir una panadería o lo que los ejecutivos hacen cuando dejan un trabajo lucrativo, pero insatisfactorio. No quería pensar en una posible relación fallida o el potencial de arruinar una nueva relación. Y casi seguro que no quería pensar en cumplir cuarenta años. Y así, en lugar de todo eso se marchó a pajarear.
Observar pájaros era su pasión. Fue sólo entre las aves que Neil se encontraba en calma, la que se le había escapado en el confuso mundo de los seres humanos. Pero esta vez también se vió envuelto en una competición. Su creciente lista de especies lo catapultó sin proponérselo a un Big Year - una carrera para encontrar la mayor cantidad de aves en un año. Sus peregrinaciones a través de veintiocho estados y seis provincias en busca de especies exóticas lo llevaron hasta un bosque de cubierto de escarcha en Massachusetts para encontrar un zorzal real; al Lago Havasu, Arizona, para ver un raro papamoscas; y a Vancouver para el coliazul cejiblanco. El Gran Año de Neil fue tan imprevisto como accidental: fue la mayor distracción que encontró en toda su vida.

Neil sorprendió al mundo de observación de aves mediante la búsqueda de 749 especies de aves y rompiendo el récord de larga data gran año. También sorprendió a sí mismo: Durante su tiempo entre los colibríes, tangaras, y piqueros, se encontró con un renovado sentido de confianza y esperanza sobre el mundo y su lugar en él.