Un relato eminentemente personal del autor de esta obra, Lance Grande, sobre el trabajo que realizan los conservadores de los museos de historia natural. Ilustrado con numerosas fotos, desgrana las aventuras, los desafíos y los retos que han de tenido que ir superando durante décadas para formar las colecciones que hoy día podemos visitar. Trata asimismo de explicar la importancia que tiene para la conservación de las especies la existencia de buenas colecciones en los museos. Mucho de lo que se explica es desde el punto de vista de un paleontólogo.