A medida que se deforestan millones de hectáreas de bosques, la necesidad de restaurarlos se vuelve urgente, ya que el 95% de la tierra podría degradarse para 2050. Aunque plantar árboles parece una solución simple, la siembra inapropiada puede dañar ecosistemas y amenazar comunidades locales. El aumento del interés en la restauración también ha dado lugar a prácticas de "greenwashing". Este libro destaca la importancia de un enfoque integrado que combine ciencia avanzada y conocimientos indígenas, y nos invita a replantear nuestra relación con los árboles y los ecosistemas.