La idea principal en torno a la que giran las fotografías contenidas en
el libro son las impresiones generadas a través de diferentes paseos por
bosques de la Península Ibérica.
La relación con ese lado oculto, ancestral que nos une a la naturaleza, en este
caso representada por el bosque, ese lugar tenebroso, a veces, incluso
fantasmagórico y a la vez placentero que tiene una profunda carga simbólica
en nuestra cultura.